La noticia es que en Villafranca, por segunda vez, una Agrupación de Electores se presenta a las elecciones municipales. Hacía falta movilizar a más de 500 personas censadas en la localidad para que con su firma ante notario o en la secretaría del Ayuntamiento avalasen la candidatura.
La Ley Electoral es exigente al respecto: se dispone de un máximo de 20 días, fines de semana incluidos. Había, pues, poco margen de maniobra; sin embargo, en apenas 10 días laborables se consiguió reunir sobradamente el aval.Acudieron al Ayuntamiento el 30% de los firmantes y el 70% restante optó por la notaría. Desde aquí destacamos la enorme profesionalidad mostrada en todo momento por el Notario y el Secretario Municipal.
La Candidatura, junto con las firmas, se presentó en la Junta Electoral de Zona tan pronto se abrió el plazo para ello. Nos consta que muchas personas quisieron firmar como avalistas de CV y no pudieron hacerlo porque ya estaba presentada la candidatura, antes de agotar los plazos. De todos modos, estas personas pueden sentirse igualmente partícipes de esta agrupación de electores, ellos lo saben.
Los ciudadanos han demostrado que Villafranca quiere esta opción electoral, y ello sin necesidad de ninguna campaña electoral, sin derrochar dinero en enormes carteles con los rostros de los políticos profesionales, que al final acabamos pagando entre todos.
Esta Agrupación de Electores se basa en el compromiso de los ciudadanos. Por eso es orgullo que nazca con 500 personas que deciden salir de sus casas y mostrar su documento nacional de identidad y estampar su firma. En ese acto, también estaban dejando patente su dignidad.
Ahora queda contemplar el despliegue propagandístico de los grandes partidos, desfiles de personalidades en coches oficiales, presupuesto sin cuento en pan y circo para hacernos creer por 3 semanas que vivimos en el país de las maravillas. Afrontaremos este reto como David esperó con su honda a Goliat.
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